Tómatelo con calma, sobre todo si sales desde Saint-Jean. Recuerda que muchos peregrinos sufren lesiones en pocos días al querer andar el camino demasiado rápido. (¡Parte de ellos han de suspender su viaje ya en Pamplona!). Concédete el tiempo necesario para encontrar un buen ritmo. Decide si quieres comenzar el camino de inmediato o si prefieres aclimatarte antes, quedándote, por ejemplo, un día en Saint-Jean, o atravesando la montaña en dos días.